Hay varias averías de software que son comunes en un ordenador con sistema operativo Windows. A continuación, se presentan algunas de las más frecuentes:
Pantalla azul de la muerte (BSOD): Esta es una pantalla que aparece cuando el sistema operativo de Windows se encuentra con un error crítico que no puede resolver. La pantalla muestra un mensaje de error y a menudo obliga al usuario a reiniciar el ordenador.
Lentitud del sistema: Los ordenadores de Windows pueden volverse lentos con el tiempo debido a la acumulación de archivos temporales y errores del registro. Esto puede ser causado por la instalación y desinstalación de programas, lo que puede dejar archivos innecesarios y entradas del registro.
Virus y malware: Windows es un sistema operativo popular y, como resultado, es un objetivo común para los virus y el malware. Estos pueden ser descargados por el usuario accidentalmente o pueden ser introducidos por programas maliciosos.
Problemas de arranque: A veces, un ordenador con Windows puede tener problemas al iniciarse. Esto puede ser causado por un problema en el sistema de archivos o en la configuración del arranque.
Problemas con los controladores: Los controladores son programas que permiten que el sistema operativo de Windows interactúe con el hardware del ordenador. Si hay un problema con un controlador, puede causar problemas con el hardware correspondiente, como problemas de sonido o problemas de conexión a Internet.
Problemas de actualización: Las actualizaciones de Windows pueden ser problemáticas en algunos casos. Una actualización mal implementada puede causar problemas de compatibilidad o incompatibilidad con otros programas instalados en el ordenador.
Estas son algunas de las averías de software más frecuentes en un ordenador con Windows. Afortunadamente, muchas de estas pueden ser solucionadas mediante la realización de tareas de mantenimiento regulares, como la limpieza del registro y la eliminación de archivos temporales, y la instalación de programas antivirus y antimalware.
